domingo, 22 de junio de 2008

Las Brigadas Voluntarias de Defensa Civil

Una herramienta olvidada
En el Perú desde que se tiene registros en nuestra historia hemos evidenciado que la ocurrencia de diferentes eventos devastadores producidos por los fenómenos naturaleza potencialmente peligrosos y las actividades no controladas del hombre entre otras, ha puesto en peligro las vidas humanas, perdiéndose muchas de ellas, y es en estas circunstancias que la voluntad de sobrevivir y ayudar se pone de manifiesto dando como resultado valiosas muestras de opoyo solidario, dignas de reconocer. Es así que se forman grupos de voluntarios de los cuales tenemos ahora en la actualidad y entre ellos el Cuerpo General de Bomberos Voluntarios del Perú, La Sociedad de la Cruz Roja Peruana, las Brigadas Voluntarias de Defensa Civil, que tiene muchos años de creación Institucionalizando, viendose que se gestan dentro de un espíritu solidario.
Estos grupos de voluntarios, describiré desde un punto de vista personal a las Brigadas Voluntarias de Defensa Civil. Según una de las definiciones para este tipo de organizaciones se denomina “Grupo de voluntarios de una comunidad constituido bajo un comando para apoyar a los Comités de Defensa Civil antes, durante y después de la ocurrencia de una emergencia o un desastre”, pues es bajo ese concepto que tiene su origen a fines de los años 70 (1978) en la ciudad de Tacna el primer grupo denominado Cuerpo de Voluntarios de Defensa Civil, ya en la década de los 80 en distrito de Chosica (Lima) se creo la Brigada de Defensa Civil llamada "Delta Delta", tanto esta como las otras posteriomente creadas se han visto desactivadas a la fecha, por falta de apoyo del sector correspondiente (alcaldes).
Entre tanto en los años 90 en la ciudad de Puno, se formó la Brigada de Defensa Civil del Comité Regional de Defensa Civil (1992), albergando a muchos jóvenes y adultos de ambos sexos que a través de la modalidad de Servicio Militar Obligatorio (dispuesrto por Ley durante dos años), vieron la mejor forma de brindar su apoyo, con tiempo sufiente para dedicarlo a otras actividades como el estudio.
La formación de brigadas en ese entonces era integral, pues se formaba personas con conocimientos y perseverancia dentro de la tan ahora tan usada Cultura de Prevención, dejando así marcada a varias generaciones que en la actualidad usan estos conocimientos en su vida diaria. Pero en los inicios de esta organización, la presencia militar fue determinante en todas las actividades, sembrando en los jóvenes voluntarios valores cívicos y morales como la disciplina, respeto, responsabilidad entre otras que fueron las que surcaron la conducta de esta organización frente a la población.
Este grupo de brigadistas tuvo una vigencia de 8 años, llegando a convocar más cerca de 350 voluntarios, preparados para enfrentar los desastres. A inicios de 1998 por razones políticas, este grupo fue sumido en el abandono, es así que a principios de 1999 la brigada dejó de funcionar como parte medular de la Defensa Civil del Comité Regional de Puno, para pasar a formar la novísima Brigada Operativa del INDECI, Sub Región – Puno, el mismo que solo tuvo una vigencia de 5 años. Su desactivación fue por disposición del INDECI a inicios del 2004. Se puede considerar que esta ha sido la única Brigada Operativa que desde sus inicios en los 90, duró 11 años al servicio de la población.
Actualmente no se tiene información que exista un grupo activo con estas características, pues ahí radica uno de los problemas más grandes que afronta es la falta de personas que puedan organizar, activar, entrenar y conducirre a estos grupos.
Se sabe que el INDECI del 2000 al 2003 ha invertido miles de soles en capacitar y formar Brigadas de Defensa Civil en las Municipalidades a Nivel Nacional, teniendo como resultado Comités de Defensa Civil que contaban con este apoyo, pero al cambiar de gestión edil muchos de ellos fueron olvidados y en algunos casos desactivados por ser considerados oposición a la nueva gestión edil. En la actualidad los que aún están operativos son manejados políticamente, desluciendo así el verdadero sentido del voluntariado que más que un servicio, es un sentimiento.
Los problemas más comunes que afrontan estos voluntarios, es la deserción de miembros, la falta de equipamiento, entrenamiento y de una directiva adecuada que pueda regir un funcionamiento dentro los estándares.
Asimismo, falta incentivos (no pecuniarios) que estimulen un buen desempeño, existe una marcada ausencia de capacitación en temas relacionados al accionar en Defensa Civil. Los miembros de los Comités de Defensa Civil dirigido por su alcalde como presidente de este Comité, deben darle mayor importancia a las brigadas.
Otra flaqueza es la promoción para fomentar esta forma de servicio. Para poder corregir estos problemas no hace falta ser ciegos, pues las soluciones están más cerca de lo que parece, ya que con el debido interés por parte de quienes corresponda sería un primer paso bien dado para activar o corregir esta organización voluntaria, que con toda autoridad puede ser una herramienta muy útil en casos de emergencias o desastres, valiéndose de algo muy especial que nos caracteriza como seres humanos, la solidaridad.
No olvidemos que el ser Brigadista es la forma más bella de amar a la Patria o dicho de otra forma un brigadista más significará un damnificado menos.
Bach. Wilfredo Zirena Mendoza

3 comentarios:

Unknown dijo...

Creo que la participacion de los brigadistas debe ser fortalecida con el apoyo del gobierno central. Conoci a los Delta Delta desde sus inicios y fue una pena que hubiera un cisma apoyado por el mismo gobierno local, cada autoridad piensa que porque los voluntarios participan activamente con el gobierno de turno son tambien enemigos politicos, es ahi donde aprovechan esos "caudillos" que nunca faltan destruyen la institucion y crean otras brigadas con el proposito de ser ellos los lideres..
Ahora que en el Plan Nacional de Prevención y Atención de Desastres, habla de un cuerpo de brigadistas, pense que habia una luz en el fondo del tunel... pero con la experiencia vivida creo que solo se quedara en ese texto y si sale alguna nueva directiva sera por alquien que nunca uso un uniforme naranja, y como siempre el brigadista desprotegido.

Edwar Recabarren
BOER

Moisés Ángel Gamarra Bravo dijo...

Mi querido Wilfredo, no podía esperar menos de un Brigadista con tanto corazón como tú; tuve la oportunidad de conocerte en Puno y contar un poco las experiencias de la Delta, gracias por darte un tiempo y hablar de nosotros, te invito a buscarnos en el FaceBook como "Delta Delta", con tus comentarios has revoloteado a mi brigada, todos están eufóricos, gracias de verdad.

Edwar, es otra persona que tengo la suerte de concoer, tenemos muchas diferencias de opinión, pero como tú y muchos Brigadistas de corazón, siempre está tratando de mejorar la imágen de su brigada, la BOER...

Finalmente, pareciera que solo como asociaciones podremos sobrevivir, como bien lo dice Edwar, parecía que había luz al final del tunel... Nosotros (Delta) somos testigos de lo que pùede suceder cuando las autoridades malinterpretan la función de un brigadista, cuando creen que son "muchachitos" que son para estibar... cuando no entienden que las horas de voluntad y sacrificio que pasa un brigadista no son para cargar bultos (que no le corremos a la tarea, pero entendemos que no es la principal función) sino que se adiestraron para la atención y administración de emergencias y desastres.

Como bien dices, Willy, no se quiere aliciente pecuniario, sino derrepente como se penso en un inicio, facilidades para capacitarse más y ser más útil a aquellos que han sido golpeados por los desastres.

Simplemente EQUIPENLOS... ellos sabrán demostrar de que materia están hechos, sino que hable Moquegua y el terremoto del 2001, que cuente Raisa, Flexible, Carlos (todos ellos) el cuellón, la monja, etc... perdónenme muchachos por continuar esta historia de anonimatos, a las justas me acuerdo de las "chapas" con que se llamaban, pero siempre los llevaré en mi corazón, trabajando duro, haciendo emocionarse a un TTe Crnl del EP hasta las lágrimas, que no entendía como es que un grupo de escuálidos muchachos podían trabajar más duro que la tropa...

Ustedes SÍ lo sabían... SI NO TRABAJABAN, SU PUEBLO SUFRIRÍA AUN MÁS... Cómo olvidar que la Brigada Yunganina, presentaba honores en el aeropuerto, y la hija estaba allí de servicio...

No he logrado muchos de mis objetivos... pero saben qué muchachos...

NO ME ARREPIENTO!! TUVE EL HONOR DE CONOCERLOS

Búho Mayor dijo...

No olvidemos: En 1984 el Instituto de Defensa Civil (INDECI) a través del Dirección de Movilización crea el "CUERPO DE VOLUNTARIOS DE DEFENSA CIVIL (CVDC)" integrando en la Unidad Piloto a 30 expertos entre bomberos, cruz rojas, dirigentes scouts miembros del equipo "Siempre Listos", etc. organizándolos y entrenándolos con cursos dictados por FOES, SUAT, Sanidad de las FF. PP., con prácticas en salas de urgencia del Hospital del Niño y el Casimiro Ulloa, con entrenamientos en helicópteros, uso de ECG, sondas gástricas, inyectables, etc.
La capacitación incluía Rapel, rescate en alturas, salvamento en espacios confinados, refugios, control de población, saneamiento ambiental, manejo de albergues temporales, primeros auxilios, desplazamientos, análisis de desastres y de casos, etc.
Tuve suerte de estar en ese equipo. Muchos de los integrantes de esa época luego trabajamos en entidades de Defensa Civil en diversos sectores. En mi caso fui técnico de Defensa Civil para CORLIMA (hoy Gobierno Regional de Lima Provincias) encargado de la cuenca media del Rímac, y en otro momento muy posterior Jefe de Defensa Civil de Cieneguilla.
Luego de entrenar año y medio pudimos atender en la emergencia de Chosica del 87.
Este fue el piloto que hizo el INDECI para crear las brigadas de defensa civil en los municipios (cosa que hoy no tiene nada que ver con lo que fue esa Unidad Piloto).